Los meses de enero y septiembre casi siempre en sus comienzos vienen cargados de ilusión, fuerza, imaginación… es decir, las emociones que al principio suelen provocar nuestros propósitos de año nuevo o principios de curso. Un cambio de año siempre es algo mágico. Aunque sea en lo más profundo de nosotros pensamos en el año o curso que comienza como en una nueva etapa, sobre todo por el hecho de que sentimos que tenemos mucho tiempo por delante para lograr nuestro objetivo. Fantaseamos con que en esta ocasión algo distinto va a ocurrir que nos lleve hasta el final de nuestra meta, y si es posible de un salto, mejor. Ese algo puede ser la lotería, un golpe de suerte o una persona que llame a tu puerta para ofrecerte justo aquello que necesitas.
Realmente no es el cambio de año lo que produce esos efectos sino el hecho de que cambia tu mentalidad.
La esperanza, la ilusión y los sueños por los que luchar son geniales y nos ayudan enormemente a elevar nuestras vibraciones, pero por favor, no cedas tu poder: ni la lotería, ni la suerte, ni un desconocido serán los artífices de tu éxito. Eres tú el creador de tu vida y tienes la capacidad de generar abundancia en muchos más aspectos de los que tu piensas. Aquí vamos a empezar a ayudarte.
El valor de los errores
Si estás a punto de comenzar un proyecto o quieres darle un impulso nuevo a uno que ya comenzaste anteriormente no deseches todo el trabajo anterior.
Vamos a comenzar enfocando lo que queremos:
Primer paso: Piensa y anota cuál sería el proyecto que realmente deseas que se cumpla en el próximo año o curso.
Si tienes dudas sobre cuál de todas las cosas que te gustaría es la más importante. Anótalas todas y luego vete descartando.
Primero, aquellas que te “emocionen” menos.
Segundo, aquellas que aunque sean parte del sueño de tu vida, consideres realmente imposibles e inalcanzables; por ejemplo: viajar a la luna, casarme con una princesa…
Tercero, si todavía quedan dudas, descarta aquellos que dependan de otras personas o de circunstancias que no puedas manejar. por ejemplo que un familiar sane, que cambien mi empresa de ubicación…
Segundo paso: Anota todo lo que has hecho las veces anteriores que lo has intentado y que te han acercado a la meta.
Tercer paso: Anota todo lo que has hecho para conseguirlo y que no ha funcionado
Cuarto paso: Anota al lado de cada error, lo que has aprendido de él. Haz especial hincapié en
- Las barreras que has encontrado.
- En lo que no te gustaría que se volviese a repetir.
- En qué personas han sido importantes en tu proyecto y quienes prescindibles.
- Sobre lo qué necesitarías para que esta vez puedas lograrlo, a quién puedes pedir ayuda, qué formación necesitarías para avanzar…
Y ya es hora de hacer tapping sobre todo lo que ha surgido. No te importe que pienses que son cosas superadas, haz tapping. Si realmente no provocan en ti emociones que te bloquean en la dirección a tu meta, tras la primera ronda lo sabrás.
EFT para diseñar tu futuro
Es importante que no pierdas la ilusión que tenías al iniciar tu proyecto, porque esa esperanza te ayudará a sobreponerte cuando haya altibajos y aquí vuelve a entrar en juego nuestra herramienta favorita.
La clave está en usar los recuerdos de los momentos de éxito en tu vida, no importa que sean de la niñez, cualquier emoción de orgullo por ti mismo, una palmada en la espalda de tu maestro o un elogio de admiración de tu compañero… todo nos vale porque EFT nos ayudará a reactivar y traer esa emoción al presente.
También puedes emplear la Técnica de la Película. Revive con los ojos cerrados aquel momento con todos los detalles o bien nárralos en voz alta (Para aprender a usar esta técnica ingresa en Membresía)
Si has leído “La biología de la creencia” de Bruce Lipton (y si no, te lo recomendamos encarecidamente) recordarás que bioquímicamente hablando, el cerebro no diferencia entre el hecho doloroso original y su recuerdo. Si cada vez que mentalmente revivimos el trauma volvemos a sentir dolor, también cada vez que revivimos un hecho alegre volvemos a sentir alegría.
Así que, ahora que estás usando EFT para impulsar tu proyecto, cuando te enfrentes a un escollo, en vez de dejarte arrastrar por una emoción negativa que te pueda llenar de ira, desesperanza, desilusión… elige recordar ese momento en el que te sentiste tan capaz, o bien elige enfocarte en ilusión del comienzo de año o de etapa.
En resumen:
- Elije ver más allá de la barrera
- Recuerda que cada problema lleva dentro de sí las semillas de su solución
- Hacer es conseguir. Mejor dar un paso, aunque sea pequeño que permanecer quieto, programando mentalmente todos los pasos siguientes
- Aunque no sepas cómo superar la barrera, sí sabes que quieres hacerlo
- Imagina que ya has superado ese problema, siente esa emoción
- …Y mucho, mucho tapping.
Ejemplo de ejercicio de EFT+ Coaching para conseguir objetivos Para este ejercicio emplearemos la técnica desarrollada por Pat Carrington, usando elecciones con «estados de recursos positivos» (un concepto que viene del PNL y del que puedes aprender más accediendo a Membresía). Para encontrar el recurso positivo que necesitamos usar en nuestra frase preparatoria, podemos buscar en nuestra experiencia o «prestar» la experiencia/recurso de otra persona. Así que después de dar voz a nuestro problema («aunque no maneje bien mis finanzas y ahora estoy en apuros..») hacemos una elección: «elijo actuar con la misma destreza que tenía al remodelar mi casa». Como veis, se puede escoger alguna habilidad que no tiene nada que ver con el problema. El siguiente ejercicio es solo un ejemplo, os recomiendo moldearlo para cualquier proyecto que os cueste realizar. Si queréis seguir el ejercicio con tapping, os recomiendo primero identificar nuestro proyecto y vuestro recurso positivo, porque el lenguaje del ejercicio obviamente es bastante genérico. (En este caso suponemos que la postergación es el resultado del miedo al fracaso.) Preparación: «Aunque estoy postergando el lanzamiento de este proyecto, elijo sentir la misma confianza en su éxito que sentí aquella vez.» (Reemplaza aquella vez nombrando tu recurso concretamente) Estoy postergando Me cuesta lanzar este proyecto No sé por dónde empezar No puedo lanzarlo Este proyecto Me cuesta empezarlo Si no lo empiezo no puedo fracasar Estoy bloquead@. Elijo confiar en su éxito Como lo hice aquella vez Elijo sentir confianza Como aquella vez Elijo confiar como aquella vez Elijo lanzarme con confianza La misma que tenía aquella vez Elijo sentir la misma confianza. Me cuesta lanzar este proyecto Pero elijo hacerlo con confianza Es difícil lanzar el proyecto Elijo confiar como aquella vez Tengo miedo a fracasar Elijo confiar en su éxito como aquella vez Estoy postergando Elijo lanzarme con confianza como aquella vez. Respira profundamente y observa como ha cambiado la energía alrededor del asunto. Termina el ejercicio repitiendo las rondas o usando EFT «normal» hasta que te sientas realmente confiad@ pensando en el proyecto. Al llegar a este punto ya estás list@ para hacer tu plan de acción. |