Miedo al éxito

Una de las principales causas por la que muchas personas no se deciden a explorar nuevos caminos en su vida, aunque lo estén deseando desde el fondo de su corazón, es el miedo al fracaso.

Es sencillo, si no inicias algo, no puedes equivocarte, no puedes fallar, no puedes fracasar. Hasta cierto punto, es comprensible esta actitud, los cambios suponen inestabilidad temporal, incertidumbre, altibajos en nuestra vida, algo que desagrada y que nos rompe esquemas.

Pero en el mismo nivel, aunque en el lado opuesto está el miedo al éxito. Seguro que si le preguntas a una persona deseosa de abrir un negocio, iniciar una relación estable de pareja, tomar la decisión de tener un hijo o de mudarse de país te asegura que nadie puede tener miedo al éxito.

¿Quién puede asustarse de conseguir lo que está buscando con tanto ahínco? Pues ciertamente muchos son los que se encuentran en ese punto.

El miedo al éxito puede estar oculto y estar interfiriendo inconscientemente en tus intentos de poner en marcha un proyecto, sea del ámbito que sea, sin que lo sepas y mucho menos comprendas porque fracasas una y otra vez, achacándolo en muchas ocasiones a las circunstancias externas cuando en la mayoría de los casos el motivo está en tu mente.

Si antes de empezar algo, se te garantizase el éxito ¿lo harías? Fácil ¿verdad? No tanto, la mayoría de nuestros “autosaboteadores” suelen estar relacionados con la idea de que no nos lo merecemos y o la incertidumbre de un futuro distinto al que conocemos. Nuestro instinto de protección salta, y nuevamente se produce el fracaso.

¿Quieres hacer la prueba? Piensa en una meta realmente importante para ti. ¿Ya la tienes? Ahora imagínate que ya has llegado, que ya lo has conseguido. ¿Eres capaz de verte así, de sentir que ya lo tienes? Mira a tu alrededor, mírate a ti mismo ¿qué emociones surgen?

La mayoría solo se concentran en lo negativo que ellos ven que puede conllevar el éxito: problemas con la familia, envidia de los amigos, resentimiento, celos… Ahí tienes un motivo de fracaso, por ejemplo.

Un aspecto importante es analizar exactamente qué es lo que deseas. Como muchas otras veces hemos comentado es más fácil saber lo que no queremos que lo que deseamos.

Puedes querer ganar más dinero para pagarte unas vacaciones espléndidas pero tal vez en el fondo lo que deseas es estar más relajado o tener más diversión en tu vida.

Los patrones que te están impidiendo conseguir el éxito no siempre se presentan de forma clara para poder trabajar fácilmente con ellos. Tienes que convertirte en observador de tu vida, analizar cómo te comportas, cómo te expresas. Muchas veces incluso es paradójico: quiero una cosa y la contraria (Quiero ganar mucho dinero, pero sin que nadie lo sepa para que no me roben… así que no lo puedo gastar) Energéticamente estás en contradicción porque has asociado el éxito a una posible consecuencia negativa y esa lucha interna te impide precisamente obtenerlo. Tienes que alinear esas dos partes de ti.

Los miedos más comunes que te impiden tener éxito

  • No soy lo suficientemente bueno: falta de confianza en tus cualidades, consideras que todavía no estás profesionalmente preparado y necesitas más formación.
  • No me merezco tener éxito: habitualmente es una creencia generada en la niñez, especialmente si hemos escuchado a menudo “este niño es tonto”, “no vales para nada”, “eres un ni-ni”, “¿tú quién te crees que eres?”…
  • Es demasiada responsabilidad: miedo a que triunfar en lo que nos proponemos nos sobrecargue de responsabilidades, de decisiones importantes, de personas a nuestro cargo.
  • Va a ser duro: asociar el éxito al trabajo duro es un mal condicionante para la mente porque puede provocar el rebote; la postergación de los pasos que hay que dar.
  • No tendré tiempo para mí: es de los más habituales asociar más éxito a más esfuerzo, más trabajo.
  • No podré atender bien a mi familia: a menudo tenemos la imagen de que las personas de éxito están tremendamente ocupadas y no tienen tiempo para sus familias, pero como nos dice la psicóloga Susitha Reddy ¿eso es una norma o un condicionamiento de nuestra mente? ¿Por qué tenemos que asociar el éxito a una pérdida?
  • Mi relación de pareja se resentirá: las películas se encargan de mostrarnos una y otra vez que cuando uno tiene éxito en un apartado de su vida, su relación de pareja se estropea: por celos, porque surgen distintas amistades, porque se cultivan intereses distintos.
  • Mis amigos me envidiarán: la imagen de que la gente triunfadora se vuelve “estúpida” es más común de lo que pensamos, ese sentimiento de “dejar de pertenecer” es importante también trabajarlo. Aquí podemos incluir la categoría de los celos profesionales.
  • Me lo querrán quitar: miedo a perder lo que se tiene, a no ser capaz de mantenerlo, a que te roben.
  • En mi familia nadie ha tenido éxito: miedo a brillar más que las personas de tu entorno y de que dejen de apreciarte por ello.
  • Miedo a ser el centro de atención: especialmente se da en personas tranquilas y tímidas.
  • Miedo a conseguir tu meta y no tener nada que hacer: es habitual en personas con éxitos laborales, de término medio, que consideran que todo lo que tienen se lo merecen porque han luchado duro por ello. También en aquellas personas que el tener siempre un proyecto en marcha les hace sentir vivos, pero cuando lo consiguen se sienten vacíos.

Añade a esta lista los tuyos rellenando el hueco en blanco: “Si yo tengo éxito……”

Este trabajo requiere persistencia, determinación y un acuerdo contigo mismo firme de querer tener éxito en aquello que te has propuesto. La EFT Master Ann Ross afirma que ella le dedica 20 minutos diarios al tapping para desbloquear el miedo al éxito.

A menos que nos sintamos confortables con la idea de tener éxito en nuestro propósito, nos autosabotearemos una y otra vez. Tu mente tiene que aceptar el éxito y todo lo que conlleva para lograr tus propósitos.


Ejemplo de ejercicio de tappping para superar el miedo al éxito
Como habéis visto, el miedo al éxito puede tener muchos aspectos y cada uno tiene sus motivos para bloquear la realización de sus proyectos. Enfocamos este ejercicio a un aspecto bastante común – el miedo a que no me acepten mis amigos, mi familia o que tengan celos. Si tú no tienes este miedo, te aconsejo remplazar las palabras y hacer el tapping con el miedo de la lista con el que resuenes.
Preparación:
«Aunque tengo miedo al éxito, me acepto completa y profundamente.»
«Aunque tengo miedo a las reacciones de los demás al ver mi éxito, me acepto de todas maneras.»
«Aunque tengo miedo a perder el amor de mi familia/mis amigos si tengo más éxito que ellos, me acepto y me quiero.»
Secuencias (ronda corta con tapping continuo, con respiración profunda entre rondas):
Este miedo al éxito.
Miedo a que me van a envidiar.
Tendrán celos.
No quiero perder su amor.
No quiero que me envidien.
Mejor no destacar.
Destacar es peligroso.
Quiero seguridad.
Tener éxito es muy arriesgado.
El éxito trae competición.
No quiero competir.
Es demasiado estresante.
No quiero cambiar.
Me van a odiar.
Me tendrán envidia.
No van a quererme.
El éxito me va a cambiar.
¿O no?
¿De dónde viene este miedo?
¿Y si me equivoco?
Puede que se alegren de mi éxito.
Si me quieren desean lo mejor para mí.
A lo mejor mi éxito les da esperanza.
Puedo ser el primero.
Puedo soltar este miedo.
¿Por qué no?
Me permito destacar
Y conseguir mi meta.
Daré un buen ejemplo.
Si tienen envidia es su problema.
Me permito superarme.
Me permito tener éxito.
Si después de estas rondas todavía te queda algo de este aspecto del miedo al éxito, haz una preparación nueva con «Aunque todavía me queda algo de este miedo ….» y usa tus propias palabras para reflejar lo que tú sientes.
Te deseamos éxito con el ejercicio
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