Diseccionando el miedo

Hay casi tantas clases de miedos como de personas.

Ya sé que esta frase es un poco exagerada pero lo que queremos decir es que no podemos hacer una lista o catálogos de miedos y trabajar de forma mecánica con ellos. El miedo es algo tan particular como la persona que lo sufre y todos tenemos miedos en distintas escalas, a distintas situaciones o personas, a distinto nivel y sobre todo con múltiples caras y formas de manifestarse.

Vivir con miedos es algo común en nuestros días. No todos los miedos son iguales, muchos de ellos son hasta razonables y no nos imposibilitan para vivir una vida plena. Nuestro cerebro límbico es el encargado de ordenar las actuaciones instintivas, pone en marcha las respuestas involuntarias del cuerpo para nuestra supervivencia es el primer filtro para la memoria emocional. Si el cerebro límbico califica una situación como buena, mala, divertida, dolorosa, desagradable, repetir, evitar…etc. así se quedará almacenada en el neocórtex. El miedo será por tanto una de las expresiones del subconsciente para evitar vivir nuevamente una situación que ha sido almacenada de desagradable, dolorosa o mala.

Sin embargo, “actuar con miedo es conseguir lo contrario de lo que deseas”, dice con mucha razón la bióloga Claudia Rainville. Pero ¿qué ocurre cuando nuestro miedo a tener un accidente nos impide conducir, salir solo a la calle, quedar con amigos para ir a cenar o viajar en Metro? Eso sí es un grave condicionante de nuestra vida.

EFT, Thetahealing y otras terapias energéticas se han demostrado muy útiles a la hora de neutralizar y borrar los miedos a nivel del subconsciente y lo mejor de todo es que lo tienes al alcance de tu mano, no tienes que llamar a tu terapeuta justo antes de coger un avión, entrar a un quirófano o hablar en público, puedes aprender a usar ambas herramientas y trabajar estos miedos antes, durante e incluso después del acontecimiento que los desencadena. Haz click aquí para ingresar en Membresía y aprender más de estas técnicas o hacer prácticas en directo.

Bienvenido Mr Miedo

Sí, esto es una gran paradoja ya que nadie quiere vivir con miedos, pero párate a pensar, si surge de repente algo que te preocupa tanto es que hay algo que tienes que arreglar, no solo para poder vivir sin ese miedo y poder sentir la libertad y tranquilidad, sino para que tus proyectos lleguen a buen fin. El miedo es uno de nuestros grandes autosaboteadores.

El miedo muchas veces es la antesala del cambio, del salto personal, del crecimiento… ese temor a salir de nuestra zona cómoda en ese caso es solo un ligero frenazo en nuestro camino, que si sabes emplearlo bien, te dará impulso para seguir. Ese miedo es normal pero cuando el miedo es crónico, y está camuflado su origen, tendrás que ser aún más persistente en el uso de EFT.

Lo mejor de EFT es que no tienes que averiguar qué es exactamente lo que te causó el miedo, no siempre es necesario. EFT funciona igual imaginando, pintando, describiendo y hasta inventando la causa ¿Qué más le podemos pedir a una técnica?

Muchos pretendemos esconder nuestros miedos porque la sociedad nos enseña desde muy pequeños que no es bueno llorar, que no es correcto ser débil, que nos enseñan desde muy pequeños a ocultar nuestros miedos, pero lo cierto es que el miedo te mantiene atado a una realidad que no te gusta. Poner excusas para no abordarlo, aplazar la búsqueda de soluciones porque es algo incómodo en este caso es lo fácil. Dale voz a tus miedos para dejarlos marchar.

El rayo láser

Con EFT podemos diseccionar el miedo al igual que si tuviéramos un láser en la mano para cortar una naranja.

Podemos empezar con la primera capa, la cáscara, que en un principio es lo más evidente, lo que nos molesta en ese momento para proseguir gajo a gajo hasta llegar a la raíz que lo sostiene y que es la puerta para la auténtica libertad.

Una vez que localizas el miedo con el que quieres trabajar, define lo que sientes:

1. Define los síntomas físicos: me sudan las manos, me duele el estómago, se me cierra la garganta, se me saltan las lágrimas, no puedo respirar, tartamudeo, siento nauseas, se me acelera el corazón…
2. Define las sensaciones que te provoca: saldría corriendo ahora mismo, tengo ganas de gritar, golpearía al primero que me toque, me quiero morir, me tiraría por la ventana, creo que me va a dar un infarto
3. Define las consecuencias de tu miedo: no puedo ir de vacaciones, tengo que salir siempre acompañado, no puedo aspirar a cambiar de trabajo, no puedo visitar a mi hijo…
4. Define qué disparadores hacen saltar tu miedo: el olor, su visión, el pensar que tengo que hacerlo, la presencia de alguien, escuchar su voz…
5. Define para qué te sirve ese miedo: si me curo del miedo tendré que… buscar trabajo, dejar la relación de pareja que tengo, enfrentarme a las causas de mi depresión, dejaran de hacerme caso, perderé mi pensión vitalicia…

Todos estos puntos son los distintos aspectos de tu miedo y si quieres hacer una buena “disección” debes abordar uno tras otro en tus rondas de tapping.

Los miedos más comunes

Aquí tienes una lista de los miedos más comunes que suelen tratarse con terapias energéticas:

• las enfermedades
• intervención quirúrgica
• a envejecer
• a la muerte
• hablar en público
• subir a un escenario
• claustrofobia
• agorafobia
• a las alturas
• volar
• serpientes, insectos, roedores
• conflictos familiares
• a perder a un ser querido
• a que nos abandonen
• relaciones sexuales o sentimentales
• relaciones laborales
• entrevista de trabajo
• problemas económicos
• a tener más que los demás
• perder el trabajo
• estancamiento en la vida
• problemas de la infancia
• bloqueo en la creatividad
• a engordar o a mantener un peso estable
• a ser feliz
• a fracasar
• al éxito
• a la crítica
• a lo que digan o piensen los demás
• a que te ridiculicen
• a equivocarte
• bloqueos deportivos o en exámenes
• miedo generalizado

 Miedo a volar

¿Sabías que la compañía aérea norteamericana Virgin Airlines recomienda oficialmente el uso de TFT (el antecedente de EFT) para el miedo a volar o que la actriz Whoopi Goldberg tiene colgado un vídeo en Youtube donde se muestra la sesión de tapping que recibió antes de tener que coger un vuelo transoceánico?

El miedo a volar suele ser un miedo a estar expuesto. Tiene aspectos colaterales comunes con otros miedos: a que se caiga el puente por el que paso, a que se me caiga algo sobre la cabeza, a resbalar al bajar por una escalera, a que el pasamanos se rompa, a perder el control durante el viaje, a que se estrelle, a las alturas, a ser secuestrado, a las turbulencias, a estar encerrado en un espacio reducido… pero si quieres sentir todo el potencial de EFT no dejes de hacer el ejercicio que te proponemos.

---

Ejemplo de ejercicio de EFT para el miedo a volar El miedo a volar puede tener diferentes aspectos según cada persona. Eva también tenía miedo a volar lo que solía traducirse en síntomas físicos como mareos, diarrea y falta de aire, además de otros muchos emocionales, de ahí que el protocolo que os ofrecemos está completamente probado y comprobado. La creencia que subyacía tras el miedo de Eva volar, y en la mayoría de personas, es ser consciente de que volando no se tiene control sobre la situación. Descubrir esto, hacer tapping sobre ello y programarse para confiar en el piloto y en el avión fueron un antes y un después. Aunque no fue el caso de Eva, es posible que también tengas que hacer tapping en aspectos como la claustrofobia, el ruido de los motores, el movimiento del estómago, lo que dicen otras personas… estc Este protocolo puede usarse para otros miedos y fobias cambiando las palabras. Preparación (en el Punto de Kárate o el Punto Sensible): «Aunque tengo miedo a volar, me acepto completa y profundamente» «Aunque en el avión no tengo control y puede pasar cualquier cosa, me acepto de todas maneras» «Aunque me da miedo no tener el control en esta situación, me acepto y me quiero» Secuencias (haciendo tapping en los puntos de la ronda corta, podéis empezar en la coronilla o en la ceja y bajar desde allí): 1. Tengo miedo a volar. 2. Este miedo que siento en el avión. 3. No me gusta volar. 4. Puede pasar cualquier cosa. 5. Y yo no tengo el control. 6. No puedo hacer nada. 7. Siento presión en el pecho. 8. Y me falta el aire. 9. Voy a entrar en pánico.   Respira profundamente…. continuamos: 1. Me da miedo no controlar la situación. 2. Miedo a estar en el aire sin control. 3. Este miedo que puedo sentir en todas mis células. 4. Apenas puedo respirar. 5. Aquí no controlo nada. 6. Aunque a mí mism@ sí me puedo controlar. 7. Puedo cambiar mis emociones. 8. Sentir miedo no es bueno para mí. 9. Necesito coger ese avión.   Respira profundamente. 1. Prefiero sentirme relajad@ en el avión. 2. Aunque no tenga control sobre su movimiento. 3. Elijo confiar en la seguridad del avión. 4. Elijo confiar en el piloto y en el buen funcionamiento del aparato. 5. Me gusta sentirme confiad@. 6. Elijo liberarme de este miedo. 7. Elijo disfrutar del viaje. 8. Quiero coger ese avión 9. Suelto el miedo de todas mis células.   Respira profundamente…. Ahora haremos una ronda entera para instalar la nueva emoción: 1. Doy la bienvenida a la confianza … 2. Y dejo que se extienda en todo mi cuerpo. 3. Doy la bienvenida a la confianza … 4. Y dejo que se extienda en todo mi cuerpo. 5. Doy la bienvenida a la confianza … 6. Y dejo que se extienda en todo mi cuerpo. 7. Doy la bienvenida a la confianza … 8. Y dejo que se extienda en todo mi cuerpo. 9. Sienta bien sentir confianza en todo mi cuerpo   Respira profundamente-   Por supuesto, este ejercicio admite todas las rondas que necesites. Si el miedo no baja de intensidad después de 4 rondas, hay que hacer más describiéndolo con más precisión, haciendo hincapié en las sensaciones físicas.